¿A quien no le encantaría estar disfrutando el crecimiento de sus hijos, desde que nacen hasta que se casan, tienen hijos y hacen una vida independiente? Creo que a la gran mayoría, ¿verdad?
Para que esto podamos vivirlo, definitivamente hay que empezar a escuchar a nuestro sabio cuerpo. A lo mejor no seremos los expertos en el tema del cuidado de la salud, ni seremos el gran médico que alguna vez en nuestra infancia nos propusimos. Para ello acabo de recordar una frase que hace poco leí:
"El que cura una enfermedad puede ser el más habilidoso del mundo, pero el que la previene es y será el médico más seguro."
- Thomas Fuller, clérigo y escritor británico
Exacto! tan claro como el agua.. el asunto de la prevención es esencial y esto viene junto a lo de escuchar a nuestro cuerpo. Tenemos momento que obviamente sabemos cuando algo esta mal, o que presentimos que podemos estar mal, esas son señales de nuestro sistema, nuestra casa que nos dice que hay que tener cuidado.
¿Por qué esperar que los síntomas aparecen antes de comenzar a prestar atención? Para
entonces, puede ser demasiado tarde. Recuerde que sus objetivos principales de vida y de la gente con la que esta viviendo. ¿Está realmente dispuesto a arriesgar a perder unos momentos maravillosos por una enfermedad o mejor prefiere tomar precauciones para evitarla?
Usted se sorprenderá de cómo algunos consejos y recomendaciones en cuanto a nutrición básica, es tan sencilla y puede hacerse tan cotidiana junto un poco de activación física pueden hacer la diferencia para que siga en pie caminando por esta gran vida.
Las lesiones y las enfermedades son un alto precio a pagar cuando muchos se pueden evitar.